Cápsula informativa 114-15
Las patadas de ahogado de los exponentes de la derecha
guatemalteca
La derecha, esa que
se ha mofado de la izquierda desde 1996, ha entrado en pánico y ha puesto a sus
voceros a gastar tinta en demostrar que “tenemos una democracia perfecta”, que
por ningún motivo debemos cuestionar. Sabemos quién es Acisclo Valladares
Molina y no podríamos esperar otras opiniones de él; pero sus escritos
resultan ilustrativos de la
desesperación de la derecha cuando afirma: “Dejen,
pues estas instituciones [MP, CICIG y otras] de hacer política, que no es la
función que les compete –Tribunal Supremo Electoral incluido– y, el amigo
diplomático de meterse –con merma de su prestigio– en asuntos que no son los
que domina [¿se referirá al Procónsul, a quien tanto acatamiento ha hecho en el
pasado?]: ninguna prisa puede haber por aprobar reformas inconstitucionales y
mediocres y –por si fuera poco– inaplicables en estas elecciones, que serán
celebradas el 6 de septiembre ¡faltan 19 días! ni un día antes, ni uno después…Manuel
Baldizón y Sandra Torres están a la cabeza y merecen estarlo: se preocuparon
por organizarse con la anticipación debida y recorrieron –uno a uno– los
caminos…La suerte aún no se encuentra echada, Zury Ríos avanza, pero, cuando lo
esté, son muchas las lecturas que habrán de hacerse del resultado electoral.
¿Un incremento significativo del voto nulo? ¿Divorcio entre lo urbano y lo
rural? ¿Entre la Guatemala tradicional y la emergente?”. Evidentemente, entre
Acisclo, Preti y Porras lo que leemos, fundamentalmente, es el temor a lo
desconocido, a una Guatemala sin el control de los grandes ricos. Son realmente
“patadas de ahogado”. Ante su incertidumbre, les repetimos:SIMPLEMENTE, NO
DEBEN REALIZARSE LAS ELECCIONES.
Guatemala y su Diáspora, 18 de agosto de 2015, Secretaría de Asuntos
Políticos de la RPDG
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