Cápsula informativa 121-15
Lamentamos disentir parcial, pero profundamente con el
Arzobispo de los Altos
Hemos
leído el comunicado del Arzobispo de los Altos, Quetzaltenango y Totonicapán,
Monseñor Mario Alberto Molina, y no podemos avalarlo cuando dice “Apelo con
urgencia a los ciudadanos de los departamentos de Quetzaltenango y Totonicapán
a recapacitar. No podemos sacar las manos y dejar que Guatemala caiga y se haga
añicos por dejación nuestra. Hay que asistir el 6 de septiembre a las urnas y
votar”. El análisis que hace el Arzobispo en su introducción es excelente y
llega a una conclusión correcta: “En estas circunstancias el sentir común es
que las elecciones son una farsa en la que lo mejor es no participar,
abstenerse, votar nulo”. Quizás, aunque lo dudamos mucho, los resultados en los
Altos podrían ser aceptables; pero eso no es razón para forzar al resto del
país a tragarse unas elecciones inconstitucionales, ilícitas, inmorales e
ilegítimas. Que en Xela y Toto hayan buenos candidatos no justifica las
elecciones ni saca al país de la crisis. La decisión de no permitir las
elecciones no es dejadez; es una decisión meditada que busca que Guatemala
tenga un sistema político nuevo y renovado. Además, quienes no culminen el
proceso electoral podrán participar igualmente en el proceso electoral depurado
¡No a las elecciones, bajo las presentes condiciones!
Guatemala y su Diáspora, 21 de agosto de 2015, Secretaría
de Asuntos Políticos de la RPDG
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